Cuantas ilusiones y esperanzas da el
comienzo de un nuevo año a todos los
humanos ¿verdad ?
Cada año que comienza nos hace sentir como
si una nueva vida comenzara.
Sentimos que el nuevo año llega con una
promesa de cambios.
Indudablemente ese pensamiento esta solo
en nuestra psiquis pues los días son todos
iguales y transcurren uno detrás del otro.
Los años pasan inexorablemente y cuando
nos damos cuenta, quizás nada ha cambiado
en nuestras vidas.
Quizás si haya cambiado algo en nuestra
vida. Quizás nos sentimos mas reposados y
nos hacemos mas maduros. Pero este madurar
nos lo da la vida, la acumulación de años,
las experiencias vividas, los
sufrimientos, y no un nuevo año en
particular.
El comenzar un nuevo año nos hace creer
que ese es el año de nuestra felicidad y
prosperidad. Sin embargo, los años, los
meses, los días y las horas, no dependen
de un año o circunstancia fortuita. Cada
segundo de vida depende de nosotros
mismos.
Hay personas que le echan la culpa a un
año de haber sido malo, pero no fue el año
en si lo que nos hizo la vida un desastre.
La persona misma seguramente no estaba
dispuesta a vivir en armonía justo en ese
año.
Otros años se catalogan como los mejores.
Sin embargo, es la persona, la sociedad,
la mente colectiva la que se predispuso
para que ese año fuera todo un éxito.
Los años no tienen vida propia por si
mismos, los años solo transcurren. Somos
nosotros quienes le damos vida a los años.
Mucha gente supersticiosa hace mil cosas
al comienzo del nuevo año para que este le
sea prospero.
Se comen 12 uvas, se piden deseos, se
prenden velas etc. etc.
La única realidad es que esos rituales no
son los que darán felicidad y prosperidad
a la persona que lo hace, porque solo de
la persona misma depende todo,
absolutamente todo, lo que suceda en su
vida.
Lo único que sabemos con certeza los seres
humanos, es que nacimos y que algún día
dejaremos esta vida temporal. Todo lo que
se desarrolle entre el periodo de vida y
muerte, es incierto. Solo DIOS sabe que
sucederá con nosotros dentro de 1 segundo
o dentro de unos días.
Solo DIOS sabe cuanto tiempo estaremos en
esta vida terrenal.
El paso por esta vida, solo lo construimos
nosotros día a día, las acciones y obras
de ayer, serán la consecuencia del hoy y
del mañana.
DIOS nos dio libre albedrío para que
fuéramos nosotros quienes decidiéramos que
caminos tomar.
Si bien para DIOS el tiempo no existe
porque Él ve nuestras vidas como si fueran
el aquí y ahora, solo nosotros podemos
tomar nuestras decisiones para bien o para
mal.
Muchas personas le echan la culpa a otros
de sus fracasos y desventuras.
Pero si bien las personas podemos tener
una vida dura por la consecuencia de los
actos de otros, también es verdad, que esa
vida dura la podemos cambiar si queremos.
Para la humanidad la felicidad es el tener
dinero para poder comprar todo lo que se
quiera. Sin embargo, esa no es la
felicidad.
La salud no se compra, la vida no se
compra, el amor no se compra, la familia
no se compra, el respeto no se compra y la
salvación eterna tampoco se compra, porque
DIOS no se vende.
Las personas transitan por la vida con un
enorme vacío en sus corazones y quienes
pueden darse todos los caprichos
comprables sienten mas vacío aun, porque
la verdadera felicidad se lleva en el
alma, el corazón y la mente.
¿Cuantas personas piden un nuevo año
colmado de PAZ, AMOR, PROSPERIDAD Y
SALUD? TODAS. Todos deseamos esos cuatro
elementos en nuestras vidas.
Sin embargo, muchos que quieren una buena
salud se dan al alcohol, las drogas, las
trasnochadas, las orgías sexuales, al
trabajo en exceso, al poco descanso y
muchas otras cosas mas. ¿Pueden estar
personas tener salud?
Claro que no, sabemos que en las
relaciones sexuales sin responsabilidad,
en las orgías, en el tener relaciones
sexuales con cuanto se presenta, y en las
drogas, un día aparecen las enfermedades
terribles que conducen a la muerte y estas
enfermedades pululan por el mundo entero.
Quienes trabajan en exceso porque solo
quieren tener dinero y llegar a la cima
saben que el cuerpo no es una maquina,
saben que este se desgasta y sobreviene el
stress que causa miles de enfermedades.
Sabemos que el alcohol conduce a la
muerte, porque además de provocar
enfermedades física que destruyen el
hígado, provoca que quien alcoholizado
desempeñe una actividad donde se requiere
de todos los reflejos al 100% , como el
manejar, el alcoholizado puede matarse o
matar a inocentes en un accidente de
auto, de moto, de barco, de aviones o de
lo que sea.
Sabemos que son miles los accidentes y
muertes al año provocados por personas
alcoholizadas manejando. Nos hemos
enterado por las noticias que pilotos
alcoholizados manejan un avión cargado de
seres humanos.
Si el alcoholizado no se mata, mata a un
inocente y termina preso por el resto de
sus días.
Las personas que comen en exceso no pueden
pedir tener una buena salud. Sabemos que
miles de vidas se pierden anualmente
debido al colesterol, la alta presión y la
obesidad.
Las personas no pueden pedir salud, si no
contribuirán a tenerla.
La magia no existe. No se puede pedir
tener 15 años cuando se tienen 60.
No se puede pedir tener salud cuando no se
respeta ni se escuchan las señales de
nuestro cuerpo.
Las personas en el año nuevo piden AMOR.
Sin embargo, el mundo entero transita por
la vida demasiado ocupado como para dar y
recibir amor.
Las personas piden de los demás lo que
ellos no son capaces de dar y esto se
convierte en un circulo vicioso.
El ser humano ha desechado el amor en alas
de lo material.
Muchos padres dejan a sus hijos casi a la
deriva por vivir envueltos en sus
actividades diarias y con los años
pretenden que sus hijos les den amor.
Los padres que no han sabido darles
tiempo, dedicación y amor a sus hijos por
darles lo material, se sienten abandonados
por sus hijos en la vejez .
Sin embargo, los hijos alegan que les dan
a sus padres ayuda económica. Los hijos le
pasan a dar a los padres ni mas ni menos
lo que sus progenitores le enseñaron a
dar, dinero pero no amor.
Las personas se crían y van por la vida
convencidos que amar es dar bienes
materiales y el amor nada tiene que ver
con lo material.
Muchos padres justifican el tiempo de
ausencia diaria en la vida de sus hijos
diciendo que quieren darles un buen futuro
a sus hijos, pero no les dan lo primordial
que todo ser necesita para salir a
desenvolverse en la vida, EL AMOR.
Un niño puede vivir sin zapatillas, sin
ropa y hasta sin alimentos, pero no sin
amor.
Las personas dicen no tener tiempo para
sus seres queridos, esposa, esposo,
padres, hermanos, hijos amigos y pretenden
tener amor de todos ellos.
Nadie puede pedir amor si no lo cultiva,
lo valora y lo ofrece.
El amor es causa y efecto, si se da amor
se recoge amor, pero si no se siembra amor
no se puede recoger lo que no se siembra.
El amor debe cultivarse, cuidarse y
abonarse a diario.
Solo quien da valor al amor, sabrá
reconocerlo, cuidarlo y hacerlo crecer.
Quienes se quejan de no encontrar amor, es
porque no solo no lo saben reconocer, sino
que tampoco lo ofrecen.
Para las personas es mas fácil dejarse
amar que amar. Quien solo se deja amar, no
puede experimentar ese sentimiento dulce
que da el amor.
Solo quien da amor conoce su efecto. El
amor no se exige, no se ruega ni se
impone. El amor nace de acuerdo al amor
que nosotros mismos entregamos.
Es imposible que una persona desleal, que
traiciona, miente, difama y es adultera
pueda pedir amor, porque esa persona no
conoce lo que es amor. Ese tipo de
personas no reconocerían el amor si este
pasara junto a ellas.
Concluimos que de nada sirve pedir amor en
un nuevo año, si no se tiene ese
sentimiento en el corazón. El amor es un
sentimiento propio de cada persona y en
lugar de pedir amor se debe aprender a
sembrarlo.
Las personas piden prosperidad en un nuevo
año.
La prosperidad no viene si no somos
personas trabajadoras. La prosperidad no
puede venir si se derrocha todo el dinero
que se gana en banalidades.
No se puede esperar ser prósperos si se
quiere tener todo con el menor esfuerzo
posible.
El tener una vida organizada y fijarse
metas, es lo que lleva al ser humano a la
prosperidad material.
No es importante solo la prosperidad
económica, mas importante es el prosperar
en la madurez y en la espiritualidad.
Hay personas que no tienen un buen pasar
económico, y sin embargo, DIOS les
prospera en madurez espiritual, y en
conocimiento. Son personas que viven para
el prójimo y entregan todo lo que tienen.
Esto también es prosperidad, pero del
alma.
Por ultimo las personas desean y añoran la
PAZ.
Para poder desear la paz, hay que
contribuir a ella.
Es fácil pedir paz pero a la vez apoyar
las guerras.
No hay causa alguna que
justifique la guerra, porque el ser humano
tiene el poder de hablar, discutir,
intercambiar para siempre llegar a
acuerdos.
A los gobernantes les es fácil declarar la
guerra, porque ni ellos ni sus hijos o
familiares van al frente. Al frente van
seres inocentes que por lo general son
jóvenes e inexpertos en cuestiones de
vida. Muchos de ellos van a las guerras
convencidos que están haciendo un acto de
humanidad con el mundo entero. Muchos van
a la guerra engañados, sin saber los
propósitos verdaderos solo se apoyan en los que les cuentan.
Los gobernantes declaran guerras y los que
van a pelear y a morir son los hijos de
otros.
Si tuvieran que ir los gobernantes a la
guerra como en la época antigua donde los
reyes iban a la batalla, les aseguro que
ningún país declararía la guerra.
Las personas ansían la PAZ, pero la paz
debe comenzar en el mismo ambiente donde
uno se mueve.
La paz se debe hacer con la familia, para
que no haya golpes, abuso físico y
psicológico.
La paz debe practicarse en el lugar de
trabajo, no peleando o hablando mal de los
compañeros o jefes.
La paz debe comenzar entre hermanos para
no salir después a pelear en pandillas a
la calle.
La paz se debe hacer en un partido de
fútbol donde muchos se matan.
La paz se debe mantener con los vecinos,
en la calle y en todas partes.
La paz se lleva en el corazón y desde allí
se expande al medio que rodea a las
personas.
Las personas viven en búsqueda de cosas
externas sin darse cuenta que la paz y el
amor nacen desde del interior del
corazón.
Quien no se siente en paz con si mismo, no
puede tener o dar paz a nadie.
Si las personas en lugar de pedir PAZ,
AMOR, SALUD y PROSPERIDAD cada año, se
dedicaran a buscar a DIOS, encontrarían
todo lo que buscan en Él.
Por mas que se tenga todo lo material que uno
ansia, en el corazón siempre existe un
vacío, si no se busca a DIOS.
Cuando DIOS reina en nuestros corazones,
no importa lo que se tiene materialmente o
exteriormente porque DIOS todo lo llena.
Quien camina con DIOS valora todas las
cosas de la vida.
Quien vive en comunidad con DIOS no puede
sentirse ansioso o estresado porque DIOS
calma toda tempestad interna.
Cuando la humanidad comience a vivir con
DIOS conocerá EL AMOR, TENDRÁ SALUD ,
PROSPERARA en todos los ámbitos y tendrá
LA PAZ interna tan ansiada.
No pidas SALUD, AMOR, PROSPERIDAD Y PAZ
para este nuevo año. Mas bien únete a
DIOS, acéptalo en tu vida y pídele que te
de sabiduría, madurez espiritual,
sensatez, paciencia y que te haga mejor
persona cada día.
Veras que conocerás el AMOR y con DIOS y
el AMOR todo lo demás vendrá por añadidura.
Yo no te deseare un año de PAZ, AMOR,
PROSPERIDAD Y SALUD, yo pediré para que
encuentres a DIOS en tu vida en verdad, y
no ficticiamente y se que Él te dará toda
una vida feliz como tu te mereces.
Y podrás tener no solo
UN FELIZ
NUEVO
AÑO
sino toda una vida feliz.
«El Señor es mi
pastor, nada me falta;
en verdes pastos me hace
descansar.
Junto a tranquilas aguas
me conduce;
me infunde nuevas fuerzas.
Me guía por sendas de
justicia
por amor a su nombre.
Aun si voy por valles
tenebrosos,
no temo peligro alguno
porque tú estás a mi lado;
tu vara de pastor me
reconforta.
Dispones ante mí un
banquete
en presencia de mis
enemigos.
Has ungido con perfume mi
cabeza;
has llenado mi copa a
rebosar.
La bondad y el amor me
seguirán
todos los días de mi vida;
y en la casa del Señor
habitaré para
siempre.»
Salmo 23
Con amor MaryKarm
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